TALAVERA DE LA REINA (Toledo)

LAS DOS REINAS: DOS MUJERES PARA LA HISTORIA

En Talavera todos los años se recrean unos hechos que cambiaron la historia de Castilla. Una historia de pasión, traiciones, amor, venganza y guerra. En 1328, el rey cristiano Alfonso XI obsequió a su esposa María de Portugal, con ocasión de su enlace, la villa de Talavera, pasando así a denominarse a partir de ese momento, Talavera de la Reina, con todos sus términos, derechos, rentas, jurisdicciones y pertenencias, consolidando su identidad y relevancia en la historia de España.

Leonor de Guzmán, favorita del rey Alfonso XI, con el que tuvo diez hijos, muere en el Alcázar de Talavera, mandada ejecutar con la aprobación de la Reina María y de su hijo Pedro I. Tras la muerte de Rey Alfonso XI, la Reina María, como venganza traslada a Leonor hasta Talavera de la Reina, villa de su propiedad, donde es ejecutada, en el verano del año 1351.

Este hecho, propició la primera guerra civil en Castilla, entre los seguidores de Enrique II de Trastámara, hijo de Leonor, que quería vengar a su madre, y Pedro I, hijo de María de Portugal, que quería seguir defendiendo su derecho legítimo al trono. Enrique consiguió la victoria tras dieciocho años de guerra, tras la muerte de su madre, en la que Pedro I pierde la vida y Enrique pasa a instaurar la dinastía de los Trastámara. Por lo tanto, Leonor logró que uno de sus hijos alcanzara el rango de rey de Castilla. Dieciocho años después de la muerte de Leonor, en el año 1369, su hijo Enrique de Trastámara asesinaba a su hermanastro Pedro I en el conocido como crimen de Montiel.

En definitiva, con «Las Dos Reinas», se recuerda la historia de las dos mujeres más talentosas y poderosas, en ese momento, de Castilla, y por tanto, de Europa.