Lakuerter Ibera

ANDORRA RETORNA A SUS ORIGENES EN EL SIGLO II A.C. Y SE CONVIERTE EN UN AUTENTICO POBLADO IBERO

El segundo fin de semana de noviembre, Andorra, vuelve al siglo II a.c., y se convierte en un auténtico poblado íbero.

La feria íbera surge como un revulsivo comercial, pero sin saberlo y ya en su inicio se convierte en una puesta en valor de su patrimonio y de su historia.

Andorra cuenta en su término municipal con 3 yacimientos íberos, uno de ellos, El Cabo, excavado en su totalidad y el cuál podemos visitar cualquier época del año y si lo contratamos con antelación la visita además de guiada puede ser  teatralizada.

Ese fin de semana la población de Andorra, los ositanos, vuelven a vivir organizados en clanes, cada clan cuenta en su organización interna con : príncipe, sacerdotisa, sabio, guerreros, agricultores…. Cada clan está representado por un animal: ciervo, cabra, búho, buitre, caballo, jabalí, lince, lobo y toro, además de por una centuria romana, que representará la rivalidad de estos dos pueblos y su lucha por sobrevivir durante esa parte de la historia, entre todos forman una gran tribu que aglutina a unas 1500 personas que con sus vestimentas complementan la feria comercial.

A lo largo del fin de semana podemos asistir a representaciones teatrales, “La Noche de Astarte”, dónde se representa ese vivir cotidiano, la encomienda a dioses y esa lucha por sobrevivir al lado del pueblo romano al que ya se le rendían y pagaban tributos.

Exaltaciones a diversos dioses y diosas como la “Diosa Epona” a la que rinde culto el clan del caballo.

Escuela y lucha de gladiadores, que entrenaba la centuria romana, y que les hacía luchar hasta la muerte por su diversión.

Desfiles de los diferentes clanes, bailes rituales y tradicionales así como actividades para niños.